¿Y la universidad?

Publicado el marzo 21, 2014Categoría: Artículos, BlogEtiquetas: 3,3 minutos de lectura

En varias ocasiones familias se preguntan si el escoger el rumbo de la educación alternativa les podría frenar o limitar a sus hijos la posibilidad de ir a una universidad. Si ese fuera el único fin de la educación podemos decir que las escuelas tradicionales hacen un excelente trabajo “entrenando” a los estudiantes para que puedan entrar en la universidad; también hacen un excelente trabajo asegurando que el proceso sea lleno de presión y tensión, además de no permitirles concentrarse en lo que realmente les apasiona.

Sin embargo, ¿cuál es el fin de la educación? Yo pensaría que es asegurarnos que nuestros hijos sean felices, sean exitosos en las áreas que les apasionan, que aporten en el mundo con su conocimiento y bondad, pero también es importante que, si es lo que quieren, puedan ir a la universidad.

Hay carreras como Medicina o Leyes en las que el sistema exige que tengas un título universitario. Pero debemos recordar que hay diversas actividades, profesiones, o emprendimientos para los que la universidad no es necesaria. Aprender sí es necesario para todos los campos de la vida, pero hemos hablado que hay muchas formas para aprender. En todo caso, si nuestros hijos quieren ir a la universidad que sea porque «realmente quieran hacerlo» y no por exigencias de un sistema o de los padres, que inconscientemente enviamos mensajes que promueven ansiedad y presión y que están rodeados de la palabra «expectativa».

¿Quiénes pueden ingresar a la Universidad? En cada país es diferente y en muchos como en el Ecuador, donde vivo, están justo en el momento de implementar cambios con más exámenes estandarizados. Soy de la opinión que mientras más exámenes estandarizados existan los colegios más van a tender a concentrarse en “entrenar” a sus estudiantes para que pasen el examen. Lo cual me parece muy triste y patético.

En los Estados Unidos (el reino de los exámenes estandarizados) existe un examen que se llama el SAT (su significado ha cambiando muchas veces y ahora es solo un acrónimo) que se requiere aprobar para entrar a la universidad. Era increíble como los padres de familia invertían tanto dinero en escuelas privadas o en cursos específicos para este examen, pero los estudios muestran que es un examen que básicamente, mientras más posibilidades económicas tenía el estudiante, habían más posibilidades de tener una alta calificación (por supuesto que hay excepciones). Esto se volvió tan claro que está también en proceso de cambio.

Desde el 2016 el formato del examen SAT será cambiado, pero lo interesante, sobre todo para las familias a las que nos apasiona la educación alternativa, es que se va a poner en línea, totalmente gratis, todos los materiales y recursos para prepararse para esta prueba. Aprendes a tu ritmo, sin ningún tipo de exclusión, si realmente quieres rendir este examen.

No me gustan las evaluaciones, porque todos aprendemos de diferentes maneras, y es imposible evaluar en masa si todos somos tan diferentes, pero si realmente te preocupaba como papá o como mamá este tema ahora sabemos que poco a poco el sistema va a valorar más (como ya lo están haciendo en Europa) el aprendizaje no formal, el aprendizaje de la vida diaria, el aporte de profesionales a quienes les apasiona lo que hacen, las posibilidades de aprendizaje para todos respetando las individualidades.

¿Te interesa conocer más sobre el tema e incluso ver más de lo que se trata el SAT? Visita el siguiente enlace en el que el College Board y Khan Academy se han juntado para proveer material gratuito para todos los que quieran prepararse para esta prueba (que es en idioma Inglés). AQUÍ EL ENLACE.