ConTusGuaguas
con Natalia Rivera V.
  • INICIO
    • Sobre Natalia
    • Enfoque de ConTusGuaguas
  • Blog
  • Podcast
  • Artículos
  • Homeschooling
  • Charlas y talleres
  • Disciplina Positiva
    • Taller Disciplina Positiva
  • Minga de familias
    • Plataforma Minga de Familias
  • Servicios
  • Recursos
    • (Recursos) VIDEOS
    • (Recursos) LIBROS
    • (Recursos) AUDIOS
  • MIEMBROS
  • Contacto
  • Preguntas Frecuentes
  • Suscribirme
  • Recursos Cuarentena COVID19
  • Charla HS legalidad Ecuador
  • Plan Virtual de Voluntariado
  • Asesoría personalizada
  • Charla Aprendizajes en casa
  • Grabación Taller aprendizaje autónomo
  • Grupo de Apoyo ConTusGuaguas

A leer (Primera Parte)

8/24/2016

0 Comentarios

 
Me gusta mucho la lectura en voz alta y es una actividad que la practicamos mucho en casa. En esta ocasión quiero presentarles algunos libros que me gusta leer en voz alta y que a mis hijos les gustan mucho. En esta primera parte me he concentrado en libros para pequeñitos a partir de los dos años. Es decir, libros que tienen unas ilustraciones muy bonitas.

​Haz click en la siguiente imagen para ver un video con los detalles...
Imagen

Ir a "A leer (2nda parte)

0 Comentarios

Tardes de poesía

7/29/2016

3 Comentarios

 
En las tardes de poesía intento crear un ambiente único donde nuestros hijos y nosotros nos sintamos relajados, conectados y la vida fluya...
¡Mira el siguiente video donde les cuento todos los detalles!
Si ponen en práctica las tardes de poesía en su casa no olviden contarme cómo les fue en la sección de comentarios bajo este blog.

Recursos que mostré en el video:

Poema "Posesión" por Carlos Suárez Veintimilla.
Serie Poesía para niños (varios poetas) de Ediciones de la Torre.
Conoce a Gabriela Mistral por Georgina Lázaro León. Alfaguara.
Palabrujas por Edgar Allan García. Alfaguara infantil.
When we were very young por A. A. Milne. Puffin Books.
3 Comentarios

La escritura en nuestra educación en familia

1/6/2016

5 Comentarios

 
El escribir es una herramienta poderosa, y siempre tuve metida en mi cabeza la idea de que el saber escribir bien era muy importante (si mi papá está leyendo la frase anterior seguramente ya está encontrando algunos errores gramaticales). Pero he decidido que a pesar de no escribir perfectamente me he lanzado a usar esta herramienta para comunicarme con ustedes. Eso toma bastante valentía, sobretodo para alguien tímida como yo.

Cuando estuve en el colegio se hacía mucho énfasis en gramática, ortografía, y vocabulario; además hacíamos muchos ensayos y seguro que me ayudó. También escribíamos un diario que era de lo más difícil porque debíamos escribir sobre lo que hacíamos cada día pero pasábamos la mayoría del tiempo en el colegio...​


Pero tengo muy claro que hay otras formas para aprender a escribir y estamos poniendo en práctica en casa con mi hijo mayor de 14 años. Prácticamente él no hace nada de ortografía o gramática formalmente pero sorprendentemente tiene una excelente ortografía y gramática. Estoy segura que tiene que ver con la lectura, y no únicamente con el acto de leer, sino sobretodo tiene que ver con “lo que lee”.
Imagen
Al leer por su cuenta buena literatura, variada, y además al leerle yo en voz alta y al conversar sobre lo que leemos, está haciendo un ejercicio constante al tener acceso a buena gramática, ortografía y vocabulario. Así su mente está en constante exposición a textos bien escritos y por lo tanto, cuando tiene que escribir algo, tiene más facilidad para hacerlo.

Sería un cambio radical y fácil de hacer el ocupar todo el tiempo que se usa en gramática, ortografía y vocabulario en los colegios tradicionales, en asegurarse de que los estudiantes lean buenos libros, que disfruten del proceso, y que no les pidan el famoso resumen del libro al final. La lectura es algo para disfrutar, y si desde pequeñitos están expuestos a buena literatura y existe la costumbre de leerles en voz alta a los niños, se daría un paso gigantesco.​


Así que el primer paso que hemos usado para mejorar el escribir es la exposición a buena literatura, pero el segundo paso también es escribir constantemente. Y eso puede ser más complejo si no existe una razón real para escribir. Es decir, si le digo a mi hijo que escriba de algún tema para que practique su escritura lo puede hacer, pero podría resultar un poco aburrido si no existe un propósito real para hacerlo. Así que algunas posibilidades incluyen el buscar razones reales para escribir, como por ejemplo que le escriba a algún amigo o pariente que viva en otro lugar. Otra forma es simplemente inscribirle en un taller de escritura creativa facilitado por alguien que tenga un estilo respetuoso e interesante de enseñar (mi hijo está ya 2 años en un taller de escritura creativa unas 3 horas semanales, una vez a la semana y disfruta mucho).
Imagen
Es interesante además que mi hijo me cuenta que quiere escribir bien en los chat de un juego de video porque dice que la forma como escribe dice mucho de él, y le toman más en serio si escribe bien. Hay que aceptar que los famosos chat sí son una forma de comunicarse, y a pesar de que a veces hay incluso palabras inventadas, es un sistema de comunicación y mientras tengan claro que es una forma de escritura que no usarían en un contexto formal no me parece malo (a menos que sea lo único que escriben...)
Imagen
Otra forma interesante de practicar gramática, vocabulario y ortografía es con el temido “copiado”. Antes de hacer educación en casa, asociaba al dictado con una actividad muy a la antigua, pasada de moda y muy de escuela tradicional. Sin embargo, al leer sobre homeschooling veía que había muchas familias, y de bloggeras que respeto, que usaban esta práctica del copiado con sus hijos. Me puse a leer más sobre todo lo que involucraba el copiado, y empecé a usarlo con mi hijo mayor. Oh sorpresa, a pesar de que no es algo que le encantaba, es una actividad que de cierta forma sí disfrutaba y todavía lo hace.


Funciona así:


  1. Él escoge un pasaje o unos tres párrafos del libro que esté leyendo (una parte que ya haya leído). Esto le toma un poco de tiempo porque quiere escoger algo que sea interesante, algo que le llame la atención, o una parte divertida.
  2. En su cuaderno de copiado (me aseguré de conseguir un cuaderno bonito, con pasta dura, que sea diferente, especial) anota la fecha, el nombre del libro y el autor y copia el texto que escogió, es decir lo transcribe.
  3. Se asegura de tomar en cuenta puntuación, y además buena letra.
  4. Una vez terminado vuelve a leer su párrafo, revisa, corrige si hiciera falta y listo.
  5. Si al revisarlo tú, encontraras 3 errores o menos es normal. Si hubiera más de tres errores significa que todavía se debe escoger menos texto o menos complejidad. Y no pasa nada si eso significa que tu hijo pueda copiar 1 oración, la idea es que también se sienta que es algo que lo puede hacer.
  6. Cuando le reviso no le tacho, ni le digo directamente si hubiera un error. Más bien suelo decir lo siguiente, “creo que debes revisar porque hay un error de ortografía”, o “revisa la tercera línea”.
  7. Si tuviera que corregir lo hace, entonces me lee en voz alta el texto y nos ponemos a conversar sobre el texto. Es decir, su significado, por qué escogió ese texto, incluso analizamos si estamos de acuerdo o no con el uso de las comas y puntos. Así nos hemos dado cuenta que hay autores que les gusta usar más comas que otros y que las formas gramaticales son variadísimas. Es decir, el mensaje que quiero que mi hijo vea es que hay infinitas formas y estilos de escribir.


¿De qué me sirve el copiado?


Pues resulta que una de las cosas más difíciles del “escribir” es que involucra muchísimas destrezas, desde la destreza de la caligrafía, la creatividad para saber qué escribir, saber vocabulario, puntuación y gramática. Es simplemente demasiado. Pero al copiar un texto estamos liberando a nuestra mente del tener que pensar qué escribir, o cómo hacerlo, y si lo hacemos con suficiente constancia nuestro cerebro empieza a automáticamente entender el sistema de puntuación, el vocabulario, el orden de las palabras, etc. Incluso puede ayudar a la creatividad en lo que escribimos, al leer la gran variedad de temas, contextos, conflictos e historias de los diferentes autores.
Imagen
Imagen
  • La clave está en hacerlo como una actividad con constancia, es decir, mínimo 2 o 3 veces por semana.
  • Que sea una actividad relajada.
  • Conversa con tu hijo o hija sobre la utilidad de la actividad y analicen el texto. (No tienes que ser una experta, es simplemente leer el texto y hablar sobre lo que se te viene a la mente con el texto y la forma de escritura).
  • Ama a tu hijo en el nivel en el que se encuentre. Lo lindo de la educación en familia es que él o ella puede hacerlo a su propio ritmo. Así que puede ser que necesite 3 párrafos grandes o 3 líneas, pero que exista constancia. Valdrá la pena. La idea es que haya 3 errores o menos en su copiado.
  • No hace falta una calificación, vas a ver su cara de satisfacción si lo hizo bien y si puso empeño.


Otras fuentes para textos para copiados pueden ser poemas y/o citas famosas. La clave es que sea buena literatura porque queremos asegurarnos que se exponga a buena literatura.

Vas a ver que poco a poco, cuando sea él o ella quien escribe sus propias ideas, tendrá más facilidad para hacerlo con esta simple práctica que toma unos 20 minutos de tu parte cada vez.


Si me preguntan a qué edad se debe empezar con esta actividad, no podría contestar, porque mi hijo empezó homeschooling a los 10 años, pero veo que sería una actividad muy útil desde muy pequeños empezando con palabras que les llame la atención, o frases cortitas, siempre y cuando sea una actividad relajada, no forzada, ir poco a poco, estoy segura que habrá niños o niñas a quienes les podría gustar mucho. Ya te contaré en el futuro cómo me va con mi pequeño que tiene toda la lectoescritura por delante. Con mi pequeño somos completos unschoolers porque es pequeñito todavía, pero siento que con mi hijo mayor hay más intencionalidad en las propuestas de actividades. Incluso ya está en edad en darse cuenta por sí mismo la utilidad de esta actividad.
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
5 Comentarios

El amor por la lectura empieza en casa

10/18/2015

2 Comentarios

 
Estoy feliz porque mi artículo "El amor por la lectura empieza en casa" aparece en la revista PARA EL AULA, una publicación de la Universidad San Francisco de Quito. Les adjunto la edición digital. Haz click en el siguiente enlace para acceder.

El amor por la lectura empieza en casa

2 Comentarios

Aprendiendo Matemáticas

7/16/2015

3 Comentarios

 

Las Matemáticas y el Homeschooling

Caras de frustración, desesperación, ansiedad. Así es como se siente en muchas familias el estudio de Matemáticas. Muchos padres se angustian por las temidas Matemáticas, y es casi como que si tu hijo “está mal” en otras áreas no es tan grave porque está “muy bien” en Matemáticas.

Nos han metido en la cabeza que las Matemáticas tienen que ser complicadas, difíciles, y a pesar de que para muchos sí es difícil, resulta que para otros es muy fácil. ¿Por qué? Bueno, porque básicamente cada uno y una de nosotras somos seres únicos, tenemos diferentes combinaciones de inteligencias, diferentes intereses, y sobretodo aprendemos de diferentes maneras. Pero dejando de lado todos estos factores fundamentales hay otros dos temas básicos más que deberíamos tomar en cuenta:

  1. Las escuelas y sus currículos dan muchísima importancia a las Matemáticas: Es cierto que si tu hijo o hija quieren ser un Físico Nuclear, un programador de sistemas, un ingeniero, o un arquitecto, el uso de sus destrezas matemáticas serán fundamentales en su vida diaria. Pero me pregunto: ¿no será que si mi hijo o hija tiene un interés genuino por estas ramas se inclinaría por naturaleza al estudio de Matemáticas? De todas formas tendría que asegurarme que exista un ambiente idóneo para que eso suceda naturalmente.
  2. La forma como se enseña Matemáticas: Es muy común oír a alguna mamá o papá que cuenta que nunca les gustaron las Matemáticas, y que cuentan que era realmente una tortura. Pero lo triste de esta situación es que vemos que la forma como aprendimos Matemáticas influyó en gran manera para que a muchas personas no les guste e incluso le teman a las Matemáticas, es decir, muchos sí aceptan que no fue la mejor manera de aprender Matemáticas, sin embargo aceptamos que les enseñen exactamente igual a nuestros hijos. El sistema más común para aprender Matemáticas en la escuela tradicional es a través de una explicación por parte del profesor, seguido por ejemplos y ejercicios y más ejercicios, y correcciones y más ejercicios, pruebas, y más ejercicios. Desde el primer año de escuela (5 o 6 años en la mayoría de países) o ¡incluso antes en algunas situaciones! los maestros ya quieren insertar el tema de números escritos o como imágenes, esto no tiene nada o muy poco sentido para los niños.


Pero, entonces ¿cuál sería una mejor forma para aprender Matemáticas? A continuación les enumero el orden que siento sería la mejor manera de introducir las matemáticas a nuestros hijos e hijas.

1. Como todo aprendizaje intenta que se inserte de manera natural en tu vida diaria. Muchos pueden hacer la pregunta de cuándo empezar a trabajar Matemáticas pero la verdad es que como seres humanos hacemos matemáticas desde que nacemos. Cuando se de la oportunidad cuenta en voz alta lo que naturalmente vayas a contar. Cuando cortes un pastel cuenta los pedazos que cortas. No es bueno insertar la idea de los números abstractos o la forma de los números porque no tienen nada de sentido en sus jóvenes mentes. Lo que sí tiene sentido es lo que pueden sentir, percibir, ver como por ejemplo “hay dos pájaros volando”, o “toma estas tres piedritas”, o “tengo dos crayones le doy una a ti y otro a tu hermano”. ¿Por qué hay ese apuro por enseñar los números escritos? Porque, igual que el tema de la lecto-escritura es lo que facilita el trabajo del maestro que tiene 30 niños para enseñar. Pero, ¿qué es lo más fácil para el niño o niña? Respetemos sus ritmos. Lamentablemente, debemos aceptar que es más difícil individualizar la educación con aulas con tantos estudiantes. Aprovecha la gran oportunidad que tienes de practicar el homeschooling para introducir las matemáticas de manera más natural, no tienes por qué hacerlo como lo hacen en las escuelas tienes todo un mundo por delante.
Imagen
Imagen
2. Léeles cuentos sobre historias reales de matemáticos, científicos o exploradores que usaron las matemáticas. Puede que sea difícil en nuestro medio encontrar un buen cuento en español sobre estos temas, en este caso puedes tú leer sobre personajes como Arquímedes, Pitágoras, Euclides, Newton, Einstein, etc. Ahora es fácil conseguir biografías, historias interesantes, documentales, videos sobre la vida de estos personajes y luego cuéntales, tomando en cuenta la etapa de desarrollo en la que están tus hijos, sobre sus vidas, sobre por qué se preguntaban las cosas que se preguntaban, o pueden hacer alguna actividad sencilla que demuestre algún principio científico descubierto por ellos. Con niños un poco mayores pueden leer el libro “El Hombre que calculaba” por ejemplo.
Imagen
3. Otra manera hermosa de introducir las matemáticas es disfrutando de las formas y los números que se encuentran en la naturaleza. Busca con tus hijos patrones, diseños, cuenta las patas de los insectos, y compáralos con el número de patas de una araña (que no es un insecto), cuenten los pétalos de diferentes flores. Observen con detenimiento el número de hojas de un trébol. Asegúrate que tus hijos tengan entre sus juguetes una cinta de medir, les encanta medir cosas, y comparar tamaños.
Imagen
4. Si tus hijos son algo mayores es hora de ponerse a jugar con hojas de cálculo. Hagan una lista de números, jueguen con las funciones que ofrece el programa, si no te sientes cómodo/a con el programa vayan jugando juntos, aprendiendo juntos. Aprendan a hacer gráficos usando datos reales de algún tema.

5. Aprendan de las fuentes originales. Si quiero saber cómo sacar el área de un cono no se aprendan la fórmula de memoria. Estudien juntos e investiguen de dónde viene la fórmula hasta que tenga sentido. En muchos casos esto quiere decir leer lo que hizo Arquímedes para desarrollar la fórmula. Y mejor si al hacerlo tengan un cono real, lo toquen, lo miren, lo sientan y puedan realmente entender el proceso y no únicamente reemplazar una fórmula. Me encanta la historia de cómo se fue encontrando el valor de PI, o cómo con relativamente fáciles cálculos matemáticos se puede calcular el diámetro de nuestro planeta si insertamos otros conocimientos de astronomía. Lee por tu cuenta libros sobre Matemáticas.
Imagen
6. Juega con las matemáticas. Hagan origami, jueguen ajedrez, armen rompecabezas, jueguen con legos, armen bloques, resuelvan acertijos, laberintos, jueguen Sodoku, diviértanse.
Imagen
7. Ahora que tú y tu hijo están enamorados de los números, de las figuras, están inspirados con la vida de matemáticos en la historia, recién es momento de intentar con los típicas operaciones matemáticas con los números pero recomiendo leer sobre el material Montessori para introducir matemáticas, me gusta mucho. Después será mucho más fácil introducir contenido un poco más abstracto o complejo porque habrá un interés real por aprender más. Es decir, introduce las Matemáticas de una manera original, divertida, y que tenga sentido.

Recursos sobre este tema

Aquí les pongo algunos recursos que me gustan. Varios están en inglés. Si conocen otros pueden anotarlos abajo en la sección de comentarios.

  • Libro “A Beginner’s Guide to Constructing the Universe” por Michael S. Schneider. Hay una versión en PDF gratuita que lo pueden buscar.
  • Video “Mile of Pi” https://youtu.be/0r3cEKZiLmg
  • Lista de reproducción “Charlas de personas que odiaban las Matemáticas” (activa los subtítulos en español): http://www.ted.com/playlists/251/talks_for_people_who_hated_mat
  • Cómo hacer un hexaflexágono (es súper divertido) https://youtu.be/VIVIegSt81k
  • Libro “El hombre que calculaba” de Malba Tahan.
  • Plataforma gratuita para aprender Matemáticas y mucho más... www.khanacademy.org
  • Blog Aprender Matemáticas usando Método Montessori http://aprendiendomatematicas.com/tag/montessori/


3 Comentarios

Mi semana

4/22/2015

4 Comentarios

 

De cómo el aprender me va convirtiendo en una mejor persona para mis hijos...

Es interesante cómo pensamos las mujeres, mil cosas a la vez, y aunque es todo medio caótico me estoy dando cuenta que no puedo no estar involucrada en varios proyectos y temas a la vez. Muchas veces, cuando se trata de educación, tendemos a preocuparnos en el cómo enseño, qué técnicas uso para enseñar, pero a través de los últimos años, me he dado cuenta de que no se trata de aprender a cómo enseñar, sino más bien aprender y sentirme cómoda en cómo aprendo. Mientras más quiero aprender se me hace mucho más fácil entender “a los que aprenden”, y, a pesar de que el aprendizaje ocurre todo el tiempo, cuando hay un aprendizaje más consciente podemos reflexionar más sobre este maravilloso proceso y podemos inspirar, acompañar y guiar de mejor forma a nuestros hijos.


Cada semana es muy diferente, quiero contarte en lo que estoy trabajando esta semana para que tengas una mejor idea de lo que se trata el inspirar a tus hijos a través de las actividades cotidianas y de cómo intento, ser una mejor mentora para mis hijos. Es un proceso... cada día sigo intentándolo...


Estoy tomando el curso “Ten Premodern Poems by Women” (Diez poemas premodernos escritos por mujeres) de la Universidad de Stanford. Este curso lo he tomado porque hace como un año estoy muy interesada en literatura clásica en general, me gusta mucho el curso. Pero es interesante porque lo que me llevó a tomar el curso es porque quiero ver a la poesía con ojos diferentes, para poder inspirarles a mis hijos a hacer lo mismo, no solo con la poesía sino con la vida en general.


También estoy siguiendo el curso “Univesity Teaching 101” de la Universidad de Johns Hopkins (a través de la plataforma de Coursera). Siento que la educación en la universidad es diferente, así que tomé este curso para ver qué técnicas muestran. Interesante que todo va con la “personalización de la educación”, oh sorpresa, es justamente lo que debería ser toda la educación.


Estoy leyendo, releyendo, estudiando el vocabulario del poema “The Raven” de Edgar Alan Poe. Esto es porque me parece muy importante que mi hijo escriba y lea muy bien en Inglés. Puedo manejarme bastante bien en Inglés, y me sentía muy segura hasta que en los últimos meses he intentado leer libros y poemas clásicos en inglés. Ha sido toda una aventura y un reto. Con mi hijo mayor estamos intentando leer a consciencia un texto corto clásico en inglés cada dos días y simplemente conversar sobre el texto. Por esto siento que debo yo leer el texto primero para estar preparada y poder de cierta forma guiar de mejor forma la conversación. Veamos como me va con “The Raven”... La semana pasada salieron tantos temas interesantes de un texto de apenas ¡3 páginas!


Estoy revisando textos sobre técnicas de escritura académica. Esto es porque siento que sin importar a qué se dedique mi hijo en el futuro quiero asegurarme que sepa escribir bien, que sepa expresarse. Para eso debo yo saber hacerlo y por eso estoy aprendiendo más sobre este tema.


Continúo con la lectura en voz alta a mi hijo mayor “Tortilla Flat” de John Steinbeck. Esto lo hacemos prácticamente todos los días. Leemos mínimo un capítulo diario y es increíble todo lo que un autor clásico te puede dar en pocas palabras. Es ridículo la cantidad de temas de los que hemos hablado debido a este libro y a otros que le he leído en voz alta. No es raro que en el almuerzo o en la cena nos pongamos a hablar de alguno de los personajes del libro.


Revisando información sobre reciclaje, agroecología y huertos caseros para una consultoría para la que trabajo a medio tiempo. Muchas veces mis hijos se involucran en mi trabajo, es por esto que mi hijo menor (3 años) siembra cada semilla que encuentra...


Terminando un taller corto sobre “Juegos de Andar en casa” de la Gran Guía de la Educación Infantil. Quería encontrar más recursos para ser más creativa en los juegos que hacemos en casa. Tengo un niño de 3 años que lo único que quiere hacer es jugar (como todos los niños) y quiero hacer nuevas propuestas divertidas con objetos sencillos. El taller sí me ha dado muchas ideas y me ha inspirado a “jugar más”.


Escuchando los audios sobre el tema de “Reading Aloud to Teens” (Leyendo en voz alta a los adolescentes). Desde hace como un año estoy de cierta forma obsesionada con el tema de la literatura clásica. Veo muchas familias que hacen homeschooling basándose en la literatura como base y que han tenido excelentes resultados. Quiero aprender más sobre diferentes técnicas para leer a los niños dependiendo de su etapa de desarrollo. He aprendido mucho sobre el tema y me siento mucho más segura de lo que hago.


Continuando con la lectura de cuentos a mi hijo menor esta semana, porque me pide que le repita una y otra vez, han sido: la “fábula del zorro y el cuervo”, la “fábula del león y el ratón”, “El mitón” de Jan Brett, “El terrible problema de murciélago” por Elsa María Crespo y Alberto Montt, “Elmer y los hipopótamos” por David McKee y “Capulí” por Guido Chaves.


Leyendo más sobre selección natural, Darwin y actividades sobre la diversidad de la vida para una actividad que vamos a hacer la siguiente semana con otras familias. He visto que una manera increíble para que mi hijo aprenda sobre temas de ciencias es proponiendo, nosotros como familia, ofrecer actividades de ciencias cada 15 días a otras familias. De esta forma mi hijo investiga, practica cómo hablar en público, organiza, planifica, diseña, y pone en práctica muchas destrezas.


Escuchándole a mi hijo mayor leerme en voz alta 4 artículos sobre el tema de la “cascarilla” (Cinchona spp.) para acompañarle, usando técnicas de escritura académica, en el proceso de escribir un ensayo coherente. Para esto estamos usando la Revista Terra Incognita, porque en algunos números tratan un mismo tema desde diferentes puntos de vista. Lo lindo de la educación en casa es que nos vamos a tomar todo el tiempo que queramos hasta sentirnos que podemos hacerlo bien. Es decir, vamos a nuestro propio ritmo.


Con mi hijo menor hicimos un pastel de zucchini.


Buscando los temas relacionados a volúmenes de sólidos geométricos en Khan Academy para recomendarle a mi hijo que vea los videos porque le sirven de complemento para las figuras geométricas que está haciendo con sus manos.


Revisé algo de material de un curso que ya había hecho sobre cómo usar los museos en educación, ya que visitamos una impresionante exposición de arte popular iberoamericano en la ciudad de Quito. Sorpresa, mi hijo menor se puso malito y no pude estar junto a mi hijo mayor durante la exposición. No pasa nada, él paso con los otros niños y adultos que fueron.


Jugué con mi hijo menor a ensuciarnos las manos con maicena con agua que sobró de una actividad que hicimos sobre Newton hace un par de semanas.


Por mi cuenta estoy leyendo “Los Miserables” de Victor Hugo. Avanzo muy lentamente...


Salimos a un parque cercano a trotar con mis dos hijos. Pero al final mi pequeño quiso usar sus patines y que le cargue para buscar cualquier tipo de rampa o puente en el parque para bajar por ahí con sus patines de mi mano.


He contestado varios correos con comentarios y preguntas sobre artículos de mi blog.


Aparte de estas actividades le he llevado una tarde a la semana a mi hijo mayor a sus clases de programación, y una vez por semana a su clase de escritura creativa.


Tuve que llevar a nuestros gatitos al veterinario, me acompañó mi hijo menor.


Mientras mi hijo mayor estaba en sus clases de escritura creativa fuimos con mi esposo y mi hijo menor a un parque muy bonito. ¡A mi hijo menor le encanta la bicicleta!


Puedo seguir con detalles más cotidianos sobre el constante arreglo de la casa, sí tengo algo de ayuda con los asuntos de arreglo de la casa, pero con un pequeño de 3 años es imposible que no haya carritos, y muchas sorpresas más por cada rincón de la casa. Varias malas noches con interrupciones porque mi pequeño tiene que ir al baño, o tiene que cambiarse de cama porque no alcanzó a ir al baño...


Mi hijo mayor se encarga de limpiar la caja de los gatos. Y a veces también le lee a mi hijo menor. Y aquí es cuando aprovecho para escribir como en este preciso momento.


Así que espero entiendan las razones por las que no he escrito mucho últimamente y que me entiendan mejor por qué considero a esta una de las épocas de mi vida cuando más he aprendido en todo sentido.

4 Comentarios

La lectura y yo

2/14/2015

0 Comentarios

 

Lo que he aprendido en estos últimos años aplicando la lectura en la educación alternativa con mis hijos

Imagen
Foto: Natalia Rivera
Cuando mi hijo mayor todavía estaba escolarizado le enviaban a leer 20 minutos cada día. Me parecía una interesante tarea (comparada con muchas otras que no tenían sentido). No me involucraba mucho, siempre revisaba cuál libro estaban leyendo y veía que disfrutaba leer, pero hasta ahí era mi intervención. Por las noches intentaba siempre leerle en voz alta pero casi siempre leíamos poco porque yo estaba cansada y a veces incluso me dormía, incluso antes que él. Pero nunca le vi tomar un libro por propia iniciativa a pesar de que sabía que disfrutaba de leer.

Cuando empecé por el camino de una educación más personalizada para mis hijos leí mucho sobre metodologías de aprendizaje, diferentes enfoques y modelos y lo que me llamó mucho la atención es que en varias como Waldorf, Charlotte Mason, Leadership Education enfatizaban muchísimo la lectura como el eje principal del aprendizaje.

También leí muchos testimonios de madres que habían ya finalizado la etapa de homeschooling con sus hijos, que ahora ya eran mayores, y todas hablaban de la lista de lectura de sus hijos. Al parecer todas hablaban del momento de lectura como casi el principal componente de la educación de sus hijos. Así que debía leer más y comprender cuál era la clave de este enfoque que me gustaba mucho y que tenía mucho sentido para mí.

Al parecer la clave estaba en qué leían, en dónde leían, cómo leían, y cuál era mi rol como mentora en la educación de mis hijos. Al comienzo, un poco asustada leía que todos recomendaban los libros clásicos. La razón es porque debemos buscar libros que tengan un buen uso del lenguaje, sean escritos por personas apasionadas por lo que escriben, y que sean libros que, sin importar cuántas veces los leamos, nos inspiren, nos enseñen, nos llenen, nos ayuden a conocernos mejor, a entender mejor el mundo, a reírnos, a entender la naturaleza humana, a descubrir nuevos mundos. A este tipo de libros la educadora británica Charlotte Mason los llamó “libros vivos”. También hay libros vivos que sin ser clásicos tienen las características de los libros vivos.

Bueno, ¿entonces la clave estaba en conseguir estos libros vivos y leerlos? A pesar de haber leído unos pocos libros vivos en el colegio no recordaba nada positivo de la experiencia. Recordaba que Shakespeare era complejo y un poco aburrido (seguramente no ayudó que debía leerlos en inglés). También recuerdo que los leí ya cuando tenía unos 15 o 16 años. Había leído varios otros libros bien sencillos, los llamados “fácil de leer”. ¡Pero en el mejor de los años leíamos 2 o 3 libros al año! Y una tía me contó que en todo el colegio (y estuvo en un supuesto buen colegio de Quito) jamás leyeron un libro. ¡El profesor les dictaba el resumen de los libros y ya! A pesar de que en mi generación supuestamente ya habíamos avanzado en el tema de educación, veía que no había tenido un encuentro muy bueno con los libros en el colegio, de la primaria ni hablar.

Con mi hijo vi que la cosa ya había mejorado un poco. Leían unos 3 libros al año en español y otros 2 en inglés en los primeros años de primaria pero era un colegio privado muy reconocido. Pero todavía mucho tiempo de clase era para la gramática, vocabulario y ortografía. Sin embargo, los libros que leían no eran clásicos, eran libros “entretenidos”. Entretenido no es malo, pero si te animas a seguir leyendo vas a entender mi punto.

Decidí que era tiempo de conseguir libros vivos así que empecé por la biblioteca de mis papás; resulta que en todos esos años de colegio estuve rodeada de libros clásicos increíbles pero no tuve la motivación, o el tiempo para leerlos. Llegaba cansada del colegio, con muchos deberes y sobretodo sin querer saber más de la parte académica, que lamentablemente la asociaba con los libros. Es interesante porque muchos de estos libros vivos incluso son más económicos que otros libros. También varios los conseguí gratis digitalmente.

Empecé a leer y leer y leer cuando podía. Me di cuenta de que mientras más libros vivos leía, era más fácil seguir leyéndolos. Ahora ya estaba inspirada, era hora de probar con mis hijos. Ahora que tenía claro qué eran los libros vivos era momento para comprender la técnica de leer en voz alta a mis hijos.

Muchos caemos en el error de pensar que una vez que los niños aprenden a leer ya no tiene sentido leerles en voz alta porque ya lo pueden hacer. Sin embargo, vamos a ver que los beneficios de leer en voz alta a los niños van mucho más allá de que mejoren el aspecto académico. El leer en voz alta a los niños mejora el vínculo con ellos. Nos entendemos mejor, nos acercamos, es el momento de estar juntos, de compartir algo, de tener un tema en común de qué hablar, podemos entendernos mejor al comentar, al reírnos.

Lo que me ha funcionado es que no hay un lugar específico para la lectura, leemos a veces en pijama todavía en cama, leemos en el sillón de la sala, leemos en la hamaca del patio. Lo importante es estar cómodos, abrigados, si hace falta tener una cobija mejor (vivo en una ciudad rodeada de montañas). Y envidio a los que tienen una chimenea en casa porque me parece tan lindo acompañar la lectura con el fuego. Mientras más leo en voz alta mejor lo hago. Es cuestión de práctica, si puedes intenta leerte a ti misma algún libro en voz alta para que te des cuenta que una entonación adecuada hace la diferencia. Además debes tomar en cuenta la puntuación.

Con mi hijo menor (3 años) leemos todos los días de 1 a 5 libros cortos diarios (¡hubo un día que le leí 17 libros en un día porque él me lo pedía!). Son libros que acompañan el texto de hermosas ilustraciones. En los libros vivos para pequeñitos, las ilustraciones son tan importantes como el texto. En general, espero a que me diga qué le lea, pero a veces si veo que el ambiente es el adecuado, yo soy la que le propongo. La rutina de la lectura en voz alta comenzó cuando era muy pequeñito (seguramente antes del año), cuando ya le leía en voz alta mientras lactaba, y para cuando tenía 2 años los libros ya eran parte importante de su vida. Ahora que tiene 3 años, hay mañanas que se despierta con la frase “léeme”. Tenemos libros en los veladores de la cama, en la sala, en el carro, y en mi bolso. Pero sí hay un lugar especial donde se encuentran la mayoría de los libros: en el estante de la sala. El primer y segundo pisos de la repisa está ocupada por sus bloques para armar, legos, sus carritos, otros manipulativos, y sus libros. Es así, que muchas veces es él que va ahí, busca y elige el libro para leer. Muchas veces vienen los niños de las casas vecinas y una de las razones por las que vienen es porque disfrutan que les lea.

Entre los autores de sus libros favoritos están María Fernanda Heredia, Edna Iturralde, Leonor Bravo, y Juana Neira. Me encantan las ilustraciones de Eulalia Cornejo. Le gusta mucho el personaje “Elmer” de David McKee. Entre sus favoritos también está “El mitón” de Jan Brett.

Su papá también le lee cuando puede. El idioma nativo de su papá es inglés, así que él le habla solo en inglés. Tenemos muchos libros vivos en inglés para él. Sus favoritos en inglés son los de los siguientes autores: Eric Carle, Dr. Seuss, Jan Brett, David McKee, A.A. Milne y Don Freeman. Algunos de estos autores tienen sus libros traducidos al español.

Intento no meter nada del tema académico con mi hijo de 3 años. Solo disfrutamos de la historia, de las ilustraciones y si me hace preguntas las respondo con la mayor atención que le pueda dar. La clave es disfrutar de la lectura, realmente leerle con ganas, si puedes hacer las voces de los personajes mejor, pero la idea es que lo hagas como te sientas cómoda o cómodo.

Hemos intercambiado libro entre otras mamás, o en muchos casos los libros de mi hijo pequeño eran los que guardé de su hermano mayor. Puedes revisar también librerías de libros usados, o visitar bibliotecas de tu ciudad. Lo bueno de los libros para niños pequeños es que son cortos y te los puedes leer en ese momento en la biblioteca.

Algo interesante que aprendí cuando leía sobre el tema de la lectura en voz alta es que también los niños más grandes e incluso adolescentes disfrutan de que les leamos en voz alta. Leo con mi hijo mayor de 13 años unas 3 veces por semana de 20 minutos a 30 minutos cada vez. Es una experiencia maravillosa, muchas veces es él que me pide que le lea, o simplemente cuando su hermano hace la siesta sabemos que es la hora de leer juntos. Es increíble cuánto me ha ayudado para comprender a mi hijo el leer con él. También me ha dado la oportunidad de hablar de tantos temas complejos de una manera más natural. Los libros vivos están llenos de personajes inspiradores y de mensajes profundos. A veces paramos casi en cada párrafo para comentar lo que dice o hace tal personaje. Es también una excelente forma de practicar la argumentación, el exponer ideas con claridad. Y he aprendido tanto leyendo juntos.

Pero por supuesto que la mayoría de lo que lee al día lo hace solo. En los últimos 5 meses van ¡más de 30 libros!, de los cuales 4 los leyó en inglés. Incluye varios libros vivos como el Diario de Ana Frank, La vuelta al Mundo en 80 días y La Isla Misteriosa de Julio Verne, los 7 libros de Las Crónicas de Narnia, Huckleberry Finn y Las Aventuras de Tom Sawyer por Mark Twain, libros de la autora Astrid Lindgren, La Isla del Tesoro de Robert Louis Stevenson, Ojos de Perro Siberiano, algunos cuentos de Edgan Allan Poe, la trilogía de Los Juegos de Hambre (que los leyó en inglés), entre otros. Ahora está leyendo Corazón de Edmundo de Amicis. Yo le sugiero libros cuando me lo pide pero es él quien elige; pero los elige de los que tiene en su estante de libros en su cuarto, por lo que la clave es asegurarme en los posible de disponer de libros vivos. Jamás le obligo a leer, realmente se ha convertido en un pasatiempo para él. En su lista ya están la serie del Señor de los Anillos. Como es de imaginar, su ortografía y vocabulario son muy buenos. Es imposible no aprender de Historia o Geografía leyendo más de 30 libros buenos en pocos meses. Ahí nos damos cuenta que se puede cubrir muchísimas áreas con solo leer libros vivos.

Pero atención, no se trata de una competencia por el número de libros que lean tus hijos. Pueden leer 4 al mes pero realmente disfrutarlos, a veces es mejor leer un capítulo y tener el tiempo para procesarlo. En los libros vivos ocurre mucho que el contenido es tan inspirador que puedes realmente incluso releerlo y seguir apreciando nuevas sorpresas. Además es una forma de explorar muchos temas diferentes, es decir, podrían encontrar lo que les apasione en la vida a través de la lectura. La gran educadora británica Charlotte Mason decía:

"Nuestro objetivo en la Educación es ofrecer una Vida Plena. La vida debería ser interesante, apasionante y no meramente un tedioso paso del tiempo. La pregunta no debería ser cuánto sabe el estudiante al terminar su educación, sino qué tanto se interesa, y en cuántos temas se interesa." Charlotte Mason

Justamente es esta educadora que acuñó el término “living books” y que en español llamamos Libros Vivos. Para que tengas una idea más clara, si quieres que tu hijo aprenda sobre la Segunda Guerra Mundial, en vez de usar un libro de texto sobre el tema puede leer “El Diario de Ana Frank” o “Soy una estrella” (tomando en cuenta la edad del niño). Y esto se aplica a cualquier área, si quieres estudiar fotografía pues lee de alguien a quien le apasiona la fotografía, alguien que vive para la fotografía. Si quieres aprender sobre sistemas de gobierno, en vez de leer de un libro de texto, pues mejor leer “Utopía” de Tomás Moro, o “La República” de Platón.



Aquí te pongo algunas recomendaciones para leerle en voz alta a tus hijos e hijas:


  • Usa libros vivos. Esto significa libros que inspiren, que sean escritos con pasión por el tema, que no nos dejen únicamente datos, sino emociones.
  • No uses versiones simplificadas de libros. Me asusta que entre los libros más vendidos para niños se encuentran libros simplificados de versiones de películas de Disney, que ya son historias simplificadas de cuentos clásicos.
  • Fíjate en la calidad de las ilustraciones si se trata de libros para niños pequeños.
  • Si usas traducciones asegúrate que sea una buena traducción.
  • Asegúrate de fomentar un ambiente donde la lectura sea considerada un placer, algo hermoso y especial. Los libros deben encontrarse en lugar donde se muestre que son más importantes y especiales que por ejemplo la televisión (si tienes televisión).
  • No caigas en el error de intentar insertar la parte académica, recuerda, quieres que tus hijos asocien el leer con algo especial y entretenido. No les pidas resúmenes o les evalúes (a menos que la pregunta venga de ellos).
  • Revisa que sean libros adecuados según la edad de tus hijos, pero no subestimes lo que pueden leer en cuanto a complejidad. Es decir, puede haber algunos temas que sean para niños mayores o que consideres no aptos para su estado de desarrollo, pero no te asustes de libros con vocabulario complejo. Siempre debes leerles libros que estén un poco más allá de lo que pensarías que pudieran.
  • Permite que tus hijos usen sus manos o se muevan mientras les leas, sobretodo si son más pequeños o tienen diferentes edades. Algunos ejemplos de actividades que pueden hacer incluyen jugar con sus bloques de armar, dibujar o pintar, o moldear con plastilina.
  • Se constante, léeles en voz alta a tus hijos, varios testimonios hablan de resultados impresionantes en tan solo 6 meses. Resultados emocionales y académicos. Si hoy no te fue muy bien, intenta después o al siguiente día.
  • Da el ejemplo, lee libros vivos, cuéntales sobre los libros que lees. Es más, recomiendo empezar por ti. Asegúrate que te vean leer. Reemplaza el tiempo de televisión por leer un libro o por la actividad de leerles a tus hijos.



Si quieres saber la lista de los libros favoritos de mis hijos y la mía escríbeme a natalia@contusguaguas.com y te la envío con gusto. También me encantaría conocer los libros favoritos de tu familia.

0 Comentarios

Buscando nuevos caminos, buscando nuevas ideas...

11/10/2014

0 Comentarios

 
ImagenFoto: Natalia Rivera
Mientras más desescolarizo mi mente encuentro mejores caminos para ser una mejor mentora para mis hijos. Es increíble como, a pesar de ser consciente de que hay mejores caminos a la educación tradicional, uno cae una y otra vez en lo mismo, la forma antigua de “enseñar”. Esto ocurre porque por haber pasado por el sistema de educación tradicional nuestra mente está, de cierta forma, programada a pensar que esa es LA forma de aprender.

Hace apenas pocos siglos no existían las escuelas, la educación ocurría a través de la exposición a grandes obras de la literatura, arte, y música. Pero lo fundamental era contar con un mentor o guía que te inspire. De la misma manera los viajes, las experiencias de la vida diaria, y la participación activa en la vida diaria y de la comunidad eran la base de una educación completa.

La forma para aprender a desenvolverse en la vida era a través de la convivencia y de las experiencias reales con la familia al comienzo, con un grupo de confianza y después con la sociedad en general. No existían ni grados, ni separación por edades en este maravilloso proceso de aprender y crecer. Pero lo que sí existía en casi todas o todas las sociedades era un sistema de clases sociales. La clase alta accedía a la educación porque podía darse el lujo de poder viajar más, de tener acceso a libros de calidad, al arte y la música. Muchos líderes que conocemos hoy aprendieron de esa manera. También hubo muchos inventores y otros líderes, que a pesar de no contar con los recursos necesarios, contaban con el tiempo y la libertad de seguir lo que les apasionaba.

Nunca ha habido en la historia de la humanidad una facilidad tan grande como ahora para acceder a la literatura, arte y música de calidad. El viajar no tiene por qué ser caro y cuando se dispone de más tiempo hay formas mucho más económicas de viajar en familia. Nunca ha sido más fácil el crear redes de apoyo, trabajar con un emprendimiento desde casa, divulgar y compartir información. Es el momento de dar un gran giro en cómo vemos la educación en la actualidad.

El primer paso para poder dar ese giro es desescolarizando nuestras mentes, es casi como reinventar la educación, nada de reformas de currículo o de número de alumnos, o de cambio de textos, una reinvención de la educación demanda una tolerancia a la diversidad. Demanda el aceptar que no existe LA forma de aprender, existen LAS formas de aprender. Que el sistema de grados, evaluaciones, premios y castigos no tiene sentido sobretodo en el mundo actual.

Ni siquiera quiero quedarme en si es mejor con o sin escuela sino en que, incluso en las escuelas, ya es más posible individualizar la educación siempre y cuando se cuente con acceso adecuado a tecnología y se cuente con profesores realmente inspirados y comprometidos con la educación. Escuelas pequeñas, pocos alumnos por clase, donde los padres se sientan cómodos al involucrarse, me atrevo a decir incluso que la escuela no sea obligatoria sino que realmente quieras ir y te sientas cómoda ahí.

Ya sé, me vas a decir que estoy soñando, que sería imposible diseñar escuelas así, pues ya las hay en otras partes del mundo y funcionan con éxito. Y ahora me vas a decir que en nuestro medio latinoamericano no funcionarían para la educación en masa, pero tal vez no creo en la educación en masa, la vida de cada ser humano es única y bella para que tenga que pasar 12 años de su vida en un sistema de educación masivo. Únicamente te pido que pienses en lo que puedes hacer tú para que la educación de tus hijos e hijas sea mejor. De seguro se te ocurren ideas, y son tus ideas porque cada caso es especial, pero solo te digo una, intenta desescolarizar tu mente... De seguro se te vienen más ideas ahora. ¿Verdad?


0 Comentarios

Creando una base sólida para la felicidad de tus hijos

6/30/2014

2 Comentarios

 
Imagen
Foto: Natalia Rivera
Por: Natalia Rivera de www.contusguaguas.com


¿Cuáles son tus metas? ¿Cómo manejas el día a día en tu vida? ¿Cómo te organizas para cumplirlas?

Es muy saludable periódicamente el hacernos estas preguntas. Si eres mamá o papá vas a notar que van a girar, muchas veces en una manera u otra, en torno a tus hijos. Si practicas la educación en casa a veces incluso más. Aunque me alegro saber que hay muchos papás que se encuentran en lo mismo, la realidad es que la gran mayoría de ustedes son mamás. Por ende escribo con sustantivos y adjetivos femeninos; no obstante estos consejos también pueden ayudar a los lectores hombres. Además, quizás les puede ayudar también para comprender a sus parejas.

Es normal que ocurra pero, sobre todo cuando practicamos la educación en el hogar, pienso que es importante que no te olvides de TUS metas, TU plan, TU día a día, que deberían de alguna forma calzar en las metas de la familia. Estamos acostumbrados, sobretodo en países latinos, a que se asocie el ser mamá con palabras como abnegación y sufrimiento, sin embargo, ¿es esa la imagen que quieres reflejar? Sin importar si practicas educación en casa o no, eres un modelo a seguir para tus hijos. Si tus hijos te ven abrumada, sin rumbo, medio confundida, agotada en el día a día, pueden ocurrir varias cosas:

  1. Serás una persona infeliz.
Acepto que el ser mamá, sobretodo de bebés, incluye malas noches, cansancio, y falta de concentración; sin embargo, esta fase no es para siempre y además es caótica pero hermosa. La maternidad es una época de crecimiento personal y emocional increíble. No digo que no vas a estar cansada y abrumada en esta temporada de la vida, pero si aceptamos que es solo una fase y que nuestra entrega asegura la base de la vida de otra persona vives esta época con una actitud diferente.

Si todavía sientes que no eres feliz, o no sabes cómo hacerlo o sientes que necesitas ayuda de tus amigos o de un profesional para encontrar la forma acude lo más pronto que puedas.



2. Tus hijos no querrán oír tus consejos porque realmente ¿cómo pueden venir consejos de ti si tú misma obviamente necesitas de consejos para la vida diaria?

Sobretodo las mamás que tenemos hijos preadolescentes y/o adolescentes sabemos que ellos buscan modelos a seguir. Conviértete en un modelo positivo e interesante a seguir. Muéstrales una positiva actitud frente a la vida. Esto no significa que no te aparezcan retos complicados o que no tengas que hacer 5 cosas a la vez porque así es la vida de mamá. Pero la clave está en la actitud frente a estos retos y cómo los afrontas.

Mientras estás preocupada sobre el mejor currículo, la mejor escuela, y sobre las finanzas, ellos te ven, te ven cómo reaccionas al estrés, te ven cómo asumes los problemas, te ven como es tu relación con tu pareja, insisto, ellos te ven. Esa es la escuela de la vida. Esa es la verdadera educación en casa. El crear un ambiente donde se respire alegría, que les transmita seguridad, donde las penas y las preocupaciones sean aceptadas como parte de la vida, pero que nuestras vidas no transcurran en torno a ellas. Donde no nos olvidemos que la vida es hoy.



3. Tus hijos copian inconscientemente ese modelo a seguir.

Es decir, empiezan a deprimirse, a pensar que la vida es estresante, dura, que el sufrir es la norma y a resignarse que sin importar lo que hagan encontrarán nuevos problemas. Tus hijos se vuelven inseguros y les da miedo hacer cambios. Prefieren rendirse antes que intentar algo nuevo que les podría causar más inseguridades.

La inteligencia emocional es una de las destrezas más importantes que les puedes ofrecer a tus hijos. Olvídate de la preocupación por currículos, clases extracurriculares, o llenarte de más trabajo para tener más dinero para supuestamente cumplir los sueños de tus hijos. Si tus hijos e hijas poseen unos padres que los amen, buenos ejemplos de inteligencia emocional y claras muestras del amor por el aprender lo tienen todo.


¿Piensan que yo ya lo pongo en práctica? Eso intento, y no es fácil cuando estamos rodeados de una sociedad consumista, competitiva, y estructurada; pero, definitivamente el practicar la educación en casa ha sido para mí una de las mejores formas para darme cuenta que el aprendizaje está en todo, que la forma como se aprendía hace 200 años, era mucho más sana y natural que lo que ocurre hoy. En esa época los niños y niñas estaban insertados en el mundo real, aprendiendo del día a día, viendo a los adultos resolver conflictos. En ese entonces las madres estaban ahí para apoyarse y aprender juntas.

La gente se sigue preguntando por qué la mayoría de los jóvenes al graduarse de los colegios se ven tan confundidos, inmaduros y no tienen idea de quiénes son cuando los hemos encerrado en un mundo irreal, aprendiendo cosas ajenas a sus vidas, cuando la mayoría del tiempo de sus días tienen como roles a seguir únicamente a sus compañeros de clase, de su misma edad, con sus mismos miedos y preocupaciones y a unos pocos adultos (los maestros) también presionados y llenos de reglas, con cada vez más informes y evaluaciones que hacer. Pero peor incluso si en casa se encuentran con unos padres desmotivados, estresados por las finanzas que solo les insisten en que mientras saquen buenas notas tendrán éxito en la vida, cuando sabemos que es una de las mentiras más grandes que existen.

¿Quieres construir un ambiente de armonía para que tus hijos sean felices y puedan cumplir sus sueños? Ámalos, enséñales inteligencia emocional a través de tu ejemplo, y asegúrate que amen aprender, ¡así lo tendrán todo!

2 Comentarios

¿Qué me cuenta una niña de 10 años sobre su experiencia en la escuela?

6/11/2014

1 Comentario

 
Imagen
Foto: Natalia Rivera

Una muy simpática niña que conozco vino a visitarme el otro día y mientras jugaba con mi hijo menor, cuando se sintió en confianza, empezó a hablarme de su escuela, y no pudo parar. Aquí les dejo algunas frases que me impresionaron de lo que me contaba. Intenté plasmar sus propias palabras. Tiene 10 años y va a una escuela privada, su clase tiene menos de 20 alumnos. Vive en Ecuador.

"Entonces como te contaba, estoy preocupada porque saqué 6 sobre 10 en Matemática en este segundo medio año. No quiero quedarme a supletorio porque no quiero arruinarles las vacaciones a mis padres."

"Me preocupo mucho porque por más que lea muchas veces el concepto de potenciación no puedo aprenderme. Soy mala para aprender leyendo, a mí me gusta aprender escuchando, pero en mi escuela la maestra dice que tenemos que leer del libro para aprender, pero no me entra el concepto de potenciación."

"Y la maestra nos dijo que nos va a dejar a todos en supletorio si no hacemos los deberes y nos portamos bien. Así que con mis amigos fuimos en secreto a ver la libreta de notas y en verdad tenía muchos ceros pero creo que en el fondo está mintiendo. Creo que a ella solo le gusta hacernos tener miedo para que le hagamos caso."

"Hay una compañera que es la mejor, a ella le sale todo bien, y tiene las mejores notas. Eso hace que el resto seamos malos alumnos, me siento mal porque sé que no soy tan buena como ella."

"La próxima semana ya vienen los exámenes, y después de esos vienen los otros exámenes, creo que los últimos son los más importantes, pero a veces ya me confundo porque tenemos muchos exámenes. Me pongo muy nerviosa cuando ya vienen los exámenes."

"Y le tuvieron que llamar a mi mamá a la escuela porque no acabé de hacer el deber: teníamos que copiar 10 veces la poesía sobre el maestro de Gabriela Mistral, pero no pude hacer tantas veces. Cuando fue mi mamá para hablar con la profesora, la profesora le dijo que además de no entregar los deberes hablo demasiado en clase y me porto mal. Creo que es una mentirosa."

"Me levanto a las 5:30 cada mañana y eso es muy duro, me gustaría levantarme un poco más tarde."

"La profesora nos dice muchas veces que somos bobos porque no entendemos las cosas que nos indica."

"Tuve mala nota en el deber del otro día porque debíamos llevar el dibujo de un tambor, que teníamos que buscar en el internet, imprimir y llevar a la escuela. Yo no tengo internet en mi casa, así que decidí dibujar un tambor, por eso tuve mala nota porque debía traer de la forma que nos dijo la maestra."


"Aunque sea haré las tareas en el bus o en el recreo para poder hacer el pastel contigo mañana tarde."

A pesar de que existen experiencias muy buenas para algunos niños y niñas en sus escuelas, creo que lo que me contó esta niña es bastante común y considerado hasta un punto normal, incluso para los padres. La escuela es vista como una experiencia que debe ser dura, difícil, y estresante. Por lo tanto el aprender se vuelve sinónimo de algo duro, difícil y estresante.

Me preocupa que muchos padres escuchen estos comentarios de sus niños y no hagan nada al respecto. O en muchos casos los niños y niñas ni siquiera se atreven a contarles a sus padres porque no les tienen confianza. Los padres y madres tenemos el derecho y la obligación de velar por nuestros niños. Si hay una maestra o un maestro que no está respetando a los niños los padres deberían hacer algo. No logramos nada quejándonos, mientras lo hacemos el tiempo sigue pasando, y los importantísimos años de la infancia de tus hijos también, ¡actúa!

Les dejó dos líneas de “La oración de la maestra” por Gabriela Mistral; me pregunto cuántas veces debe escribir el poema la maestra de esta linda niña para entender el significado del poema.

“Dame el ser más madre que las madres, para poder amar y defender como ellas lo que no es carne de mis carnes. Alcance a hacer de una de mis niñas mi verso perfecto y a dejarte en ella clavada mi más penetrante melodía para cuando mis labios no canten más."

1 Comentario
<<Anterior
Siguiente>>

    Autora:

    Natalia Rivera V.

    Archivos

    Diciembre 2019
    Agosto 2018
    Noviembre 2017
    Septiembre 2017
    Agosto 2017
    Julio 2017
    Mayo 2017
    Marzo 2017
    Septiembre 2016
    Agosto 2016
    Julio 2016
    Enero 2016
    Octubre 2015
    Julio 2015
    Abril 2015
    Febrero 2015
    Noviembre 2014
    Junio 2014
    Mayo 2014
    Abril 2014
    Febrero 2014
    Enero 2014
    Diciembre 2013
    Noviembre 2013
    Octubre 2013
    Septiembre 2013
    Agosto 2013
    Junio 2013

    Categorías

    Todos
    Currículo
    Educación Alternativa
    Educación Alternativa
    Educación Sin Escuela
    Escritura
    Homeschooling
    Lectura En Familia
    Matemáticas
    Recursos Educación
    Recursos Educación
    Vida En Familia Y Educación Alternativa
    Vida En Familia Y Educación Alternativa

    Fuente RSS

    Imagen
    Licencia Creative Commons
    Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.

    Imagen
    Más info sobre SERVICIOS
© 2020 ConTusGuaguas - Todos los derechos Reservados - EC170156 Ecuador
Suscribirme - Contacto
Fotos utilizadas con licencia Creative Commons de shonk, quinet, byzantiumbooks, luisjromero, Roberto Bonvallet, georigami, CallMeWhatEver, kmardahl